Llenas y listas para estar firmes
«Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo, porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este mundo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes, Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo y, habiendo acabado todo, estar firmes» (Efesios 6: 11-13).
veces cometo el desafortunado y crítico error de ir al supermercado con el estómago vacío. He descubierto que cuando voy a comprar sin haberme llenado, tiendo a comprar más de lo que necesito. De repente todo se ve bien, ya sea algo saludable como fruta fresca o no saludable, como rosquillas. Actuando por impulso, inspirada por el apetito, echo mano de la fruta. Sin embargo, también lleno mi carrito con rosquillas, galletas y un pastel. Por supuesto, mi cuerpo puede prescindir de la comida basura, pero cuando tengo hambre, me acerco a ella sin darme cuenta.