Matutina de la Mujer: Enero 13, 2015

Jehová es mi guardador

Jehová de los ejércitos está con nosotros; nuestro refugio es el Dios de Jacob. Salmo 46:7

Era un día muy frío. La temperatura estaba a —22 °C (-7 °F). Era el día más frío que había vivido en toda mi vida. Cuando salí a calentar el automóvil, el aire era tan frío que me arrancó lágrimas.

Pedí a Dios que me protegiera en el camino, y salí confiada. Cuando llegué al trabajo, una compañera señaló un neumático del auto y me dijo: “¿Y cómo llegaste hasta aquí en esas condiciones?”. Cuando miré la llanta, no podía creer lo que mis ojos veían. Una goma delantera de mi auto estaba tan baja que temí que estuviese pinchada. Me pareció extraño, porque pensé que debería de haber sentido algo mientras manejaba en la carretera.

La situación me preocupó bastante, porque estaba sola en casa. Mi esposo estaba fuera del país. De inmediato llame al Departamento de Mantenimiento de la empresa donde trabajo para pedir ayuda, pero ellos no pudieron hacer nada. Así que, al final del día, alguien me llevó a mi casa.

Cuando llegó mi esposo, tuvo que buscar una herramienta especial para poder cambiarla llanta. Me dijo: “Era muy difícil que alguien se detuviera a ayudarte en un día tan frío”.

Alabé a Dios por su cuidado y protección. Nunca he cambiado una rueda y, si me hubiera dado cuenta del problema, me habría bajado del automóvil a esperar que alguien se compadeciera de mí y me ayudara. Difícilmente alguna persona se hubiera detenido. Gracias a Dios que pude llegar sana y salva a mi trabajo. El Señor es grande y maravilloso; no permitió que quedara abandonada en el camino temblando de frío, ni tampoco que tuviera que dejar mi auto en un lugar peligroso.

Mi querida hermana, ¡Dios jamás nos abandona en el camino de la vida! Él se goza en ayudarte, cualquiera sea tu necesidad. No tengas tumor de buscarle, pues nunca te abandonará. Él “es nuestro amparo y fortaleza, nuestro pronto auxilio en las tribulaciones” (Sal. 46:1). La Biblia está llena de promesas ¡Jara los que confían en Jehová. ¡Es hermoso saber que el Dios todopoderoso es  nuestro guardador!