Buscar...

miércoles, 2 de agosto de 2017

Matutinas de Menores : Agosto 2, 2017

HAZLE UN PRÉSTAMO AL SEÑOR


“Servir al pobre es hacerle un préstamo al Señor; Dios pagará esas buenas acciones”. Proverbios. 19:17, NVI.


Hailey Ford es apenas una jovencita, pero ya le ha hecho un gran préstamo al Señor.
Dios, algún día, le pagará sus buenas acciones. ¿No te gustaría que el Señor te debiera algo y te lo pagara algún día? Es muy fácil: solo tienes que servir a los pobres. Eso significa que donde veas que alguien necesite de algo, intentes ayudar a suplir esa necesidad. Eso fue lo que hizo esta jovencita de Washington, Estados Unidos.
Hailey estaba un día paseando con su mamá, cuando vio a una persona pidiendo en la calle. Hailey no tiene dinero, porque aún no trabaja, pero pensó que no tener dinero no significa no poder hacer algo. “Le daré mi sándwich”, dijo. Y eso fue lo que hizo. De camino a casa, Hailey iba pensando que aquel gesto no era suficiente, que hay demasiada gente que pasa hambre, y que le gustaría hacer algo más para ayudar. Fue así como se le ocurrió plantar un huerto en el patio de su casa, y regalar todos los frutos a personas sin hogar.
Al comienzo, su mamá creyó que aquella era una idea pasajera, que no le duraría mucho el entusiasmo a Hailey. Pero se equivocó. Cada vez la joven se sintió más motivada a realizar aquella labor. Los esfuerzos de Hailey comenzaron a comentarse por todas partes, por lo que empezó a recibir donaciones de conocidos y anónimos, que también querían ayudar. Con ese dinero, construyeron unos cuartos de hospedaje de madera, con baños individuales, para que gente sin techo tuviera dónde pasar la noche.
Camas, sábanas, toallas, jabón… Hailey les ofrece de todo, para que puedan sentirse personas con dignidad, y dormir abrigados y felices al menos por un tiempito, mientras enderezan sus vidas. ¿Qué te parece esta iniciativa? A mí me parece extraordinaria. Creo que si hubiera muchos más jovencitos como ella, no habría pobres en el mundo. Déjame decirte que ser creativo para ayudar a los demás es algo que está al alcance de todos. Tú también puedes hacerte famoso en tu vecindario ayudando a quien lo necesita. Así dejarás el nombre de Jesús en alto. Y algún día tendrá que pagarte la deuda por tus buenas acciones.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario