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miércoles, 17 de junio de 2015

Matutina de Menores: Junio 17, 2015

¿Por qué tiembla la Tierra?


Experimenta: ¿Has vivido un terremoto en carne propia?

La superficie de nuestro planeta puede hacernos pensar que vivimos sobre una pelota lisa pero no es así. La Tierra está constituida por bloques que forman su corteza. Entre los bloques hay grietas llamadas fallas. Cuando en la profundidad de la Tierra se libera energía, sube directamente y busca salir a través de las fallas, provocando el movimiento y choque de los bloques de la corteza terrestre. Ese movimiento es llamado sismo, o terremoto.

Los científicos aún no logran pronosticar un terremoto con suficiente anticipación. Los temblores ocurren inesperadamente y nos toman por sorpresa. En un año puede temblar más de un millón de veces; la mayoría no se percibe porque son de baja intensidad. Si el lugar en que vives está situado cerca de una de las fallas de la corteza terrestre, seguramente sentirás que tiembla frecuentemente.

Hay terremotos de tan alta intensidad que provocan daños a casas y edificios, derrumbes de montañas, olas gigantescas y hasta la muerte de cientos o miles de personas.

¿Por qué tiembla la Tierra? Lee atentamente lo que dice la Biblia: «La tierra tiembla cuando él la mira; ¡echan humo los montes cuando él los toca!» (Salmos 104:32). «Ante él tiemblan las montañas; los cerros se derriten en su presencia. Toda la tierra se estremece al verlo; todo el mundo y los que en él viven» (Nahúm 1:5). «El Señor es el Dios verdadero, el Dios viviente, el Rey eterno. Cuando se enoja, tiembla la tierra; las naciones no pueden resistir su ira» (Jeremías 10:10).

Los terremotos nos deben recordar que, a pesar de los adelantos de la ciencia, siempre seremos muy frágiles sin el poder de Dios. Únicamente sus caminos son eternos seguros y firmes.

«La tierra tiembla cuando él se detiene; se estremecen las naciones cuando las mira; las viejas montañas se derrumban y se deshacen los montes antiguos; pero los caminos de Dios son eternos» (Habacuc 3:6)

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