Un ejército fuera de serie
Experimenta: Al rededor de ti hay un ejército asombroso, con caballos y carros de fuego, como el que protegió a Eliseo y a su criado, aunque no lo puedas ver. ¡Confía, porque ahí está!
Inmediatamente después que el rey de Siria se enteró de quién era el espía de los israelitas que echaba a perder sus planes, ordenó su captura. Uno de los hombres regresó pronto con la información: Eliseo dormía en la ciudad de Dotán.
Como si el profeta hubiera sido muy peligroso, el rey sirio envió un destacamento de hombres armados, con caballos y carros de combate. Aquella noche rodearon la ciudad, para sorprender a Eliseo.
Cuando amaneció, el criado del profeta se alistó y al salir, se llevó una enorme sorpresa. Se estremeció al ver que un gran ejército con caballos y carros de guerra rodeaba Dotán. «Y ahora, ¿qué vamos a hacer?» preguntó lleno de miedo a Eliseo. Este contestó tranquilamente: «No tengas miedo, porque el ejército que está con nosotros es más grande».
«¿Qué? ¿Cuál ejército está con nosotros?», debió pensar el criado. Con ellos no había soldados que cuidaran la puerta, mucho menos podía decir que había un ejército para protegerlos. ¿De dónde sacaba Eliseo esas ideas?
Eliseo se dio cuenta de que su compañero no sabía de qué hablaba, así que pidió a Dios que le hiciera un pequeño favor: que abriera los ojos de su criado para que pudiera ver lo que él sí veía.
Dios respondió inmediatamente la oración de su profeta y el criado vio algo sorprendente. ¡Alrededor de Eliseo había un ejército fuera de serie, con caballos y carros de fuego! ¡Por supuesto que era mucho más grande y más poderoso que el de los sirios! ¿De qué podía tener miedo ahora el criado de Eliseo?
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