La causa de los malestares estomacales de Dios
Experimenta: ¿Te has enfermado del estómago por comer alimentos en mal estado?
Me pregunto cómo se conservaban los alimentos antes de que surgiera el refrigerador. Es un invento más o menos reciente, En 1939 la compañía General Electric empezó a vender los refrigeradores más parecidos a los usados hoy en día.
El refrigerador es uno de los inventos que más agradece la humanidad. ¿Cómo conservaríamos o enfriaríamos nuestros alimentos? ¿Puedes imaginar el desastre que sería no tener refrigerador, sobre todo en lugares cálidos? La mayoría de los alimentos comienzan a descomponerse entre una y cuatro horas después que los preparamos. Si transcurre más tiempo, ni siquiera el refrigerador pueda evitar que se desarrollen microorganismos que causan enfermedades.
Hay dos maneras de mantener la comida en buen estado: o muy caliente o muy fría. Los alimentos tibios pueden provocar enfermedades estomacales que producen vómito y diarrea. ¡Aun a Dios le asquea lo tibio! Dice que si somos tibios, nos vomitará de su boca.
Los tibios son los que a veces se portan bien pero otras, mal. En ocasiones quieren obedecer, pero a veces prefieren hacerse los sordos. Una persona tibia es la que se está echando a perder. Si no corre para que Jesús la conserve a temperatura perfecta, se arriesga a no ir al cielo. Ahí no entrará alguien tibio, casi en descomposición. Dios no quiere vomitarnos de su boca; desea que vivamos con él para siempre. Por lo tanto, pide a Dios ahora mismo que te ayude a obedecer siempre y ser tan fiel, que nunca le causes un malestar estomacal.
«Yo sé todo lo que haces. Sé que no eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente! Pero como eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de ml boca» (Apocalipsis 3:15, 16).
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