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sábado, 30 de agosto de 2014

Matutina de la Mujer: Agosto 30, 2014

Un mensaje para ti


Sino que en la ley de Jehová está su delicia, Y en su ley medita de día y de noche.” Salmo 1:2



Hoy quiero compartir contigo una experiencia que valoro mucho. En mi vida ha resul­tado una bendición diaria meditar en los devocionales para damas. Cuando estoy pasando por alguna dificultad, el devocional tiene las palabras justas para mí.

Escribo desde mi cama, adolorida. A mi lado está mi bebita Adriana, de diez meses, terminando el proceso de la varicela, una enfermedad viral generalizada que afecta preferentemente a los niños menores de diez años y puede complicarse en adultos mayores de veinte, y hasta ocasionarles la muerte.

Como no tuve varicela en mi niñez, no me apliqué la vacuna, y ahora me contagié de mi hija de una forma severa, lo que me produjo una alteración del equilibrio y una marcha inestable, además de un dolor en todo el cuerpo que no me permite hacer nada, ni siquiera amamantar a mi bebé. Al dolor se sumó la tristeza de no poder celebrar el cumpleaños de mi esposo… Es en momentos como este cuando el devocional viene en mi ayuda.

En el mensaje matinal del 20 de julio de 2010, de las meditaciones para damas, encontré un pensamiento que me ayudó a acercarme más a mi Dios y a depender de él: “Señor, hay momentos en que la lucha de la vida parece más grande de lo que puedo soportar, el dolor más grande de lo que puedo aguantar y el costo de la vida más grande de lo que puedo pagar. En estos momentos de debilidad elijo volverme a ti para recibir fuerzas, confiando en que nunca me fallarás. En estos momentos de cansancio, ayúdame a no olvidar el gozo que me has preparado para el final, así como la promesa de fuerza y poder para soportar mi situación actual contigo” {Mi refugio [ACES, 2009], p. 205).

Estas palabras me ayudaron a soportar los dolores y complicaciones de la varicela, y sentí deseos de escribirte y contarte que no fue casualidad que me encontrara con esas palabras justamente en un día como hoy. Dios sabía que me ayudarían a soportar el dolor y a superar el proceso viral.

Amiga, te invito a que busques a Dios diariamente y medites en su Palabra. No dejes de hacer tu devoción personal porque seguramente allí encontrarás el mensaje que necesitas.

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