Los deseos del corazón
Experimenta: ¿Cuál es el deseo más profundo de tu corazón, el sueño más grande que tienes?
Cuando duermes, tus sueños incluyen imágenes, sonidos, sensaciones y pensamientos que se mezclan con lo que has vivido. Tú no tienes el control. Hasta puede ser que al otro día olvides lo que soñaste. Pero soñar despierto exige esfuerzo. Se refiere a lo que deseas con todo tu corazón y quisieras de verdad lograr en el futuro.
Un periodista entrevistó a un grupo de niños y adolescentes de Latinoamérica. Preguntó cuáles eran sus mayores sueños, qué deseaban en sus corazones con más fuerza.
Algunos niños de la ciudad respondieron que su deseo era ir de paseo al campo y montar a caballo. Otros, de familias de escasos recursos, dijeron que anhelaban comer en un restaurante. Algunos de familias acomodadas en la ciudad dijeron que soñaban viajar y conocer otro país. Sin importar el lugar de origen o situación económica, un grupo de adolescentes contestó que su mayor deseo era que sus padres dejaran de pelear; soñaban con vivir en una familia feliz. Otros más, aunque fueron muy pocos, respondieron que deseaban terminar una carrera universitaria.
Es bueno que soñemos despiertos, Dios puso esa necesidad en todos nosotros. Siempre que sueñes así, incluye a Dios; él está disponible todo el tiempo. Uno de sus placeres, es hacer tus sueños realidad, siempre y cuando lo que desees sea para tu bien y tengas ganas de luchar por obtener lo que has soñado.
Piensa bien cuáles son tus sueños, los deseos más profundos de tu corazón. Cuéntalos a Dios y trabaja muy duro para conseguirlos. Así te darás cuenta de cómo Dios coopera contigo y, poco a poco, los hace realidad. Al final, cuando veas tus sueños cumplidos, recuerda agradecer a Dios por haberte inspirado y dado fuerzas.
No sé cuál sea el mayor anhelo de tu corazón. Este día quiero desearte que Dios te conceda lo que deseas y que tus sueños se hagan realidad.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario