Matutina de Menores: Abril 1, 2015

Hipopotomonstrosesquipedaliofobia

Experimenta: ¿Sabes que es la hipopotomonstrosesquipedaliofobia?

Ojalá tú nunca padezcas de hipopotomonstrosesquipedaliofobia. Es uno de los miedos más absurdos: la fobia a decir palabras largas o complicadas. Quien la padece ni siquiera puede decir el nombre, por miedo a pronunciarlo mal y que alguien se burle. La única manera de decir el nombre de la fobia es no padecerla.

El miedo a hablar incorrectamente frente a los demás no es nuevo. Hace miles de años, un hombre quería negarse a hablar con el faraón de Egipto porque se le dificultaba hablar. No sé si padecía hipopotomonstrosesquipedaliofobia, pero hablar le daba miedo. Un día, frente a una zarza en llamas, Moisés confesó a Dios su miedo: «Señor, yo nunca me he distinguido por mi facilidad de palabra… francamente, me cuesta mucho trabajo hablar».

Dios no se burló de Moisés pero sí lo reprendió: «¿Quién le puso la boca al hombre? —respondió–, ¿Acaso no soy yo, el Señor?». Inmediatamente después le ordenó que empezara a caminar rumbo al palacio del faraón. Prometió que lo ayudaría a hablar y le diría qué decir. Hasta le buscó un compañero para que no fuera solo y se sintiera más seguro, aunque no era el plan original. Moisés y su hermano Aarón se presentaron nada menos que ante el faraón de Egipto, más de una vez. Dios siempre los ayudó a hablar.

¿Te da miedo hablar con otras personas o en público? ¿Piensas que será difícil recordar lo que debes decir o que quizá no puedas pronunciar bien las palabras? ¿Crees que terminarás en vergüenza o llorando? No importa a qué le tengas miedo. Dios puso la boca al hombre y él puede hacer que hables, si es necesario, con la persona que está frente a ti o el presidente de tu país. Únicamente necesitas confiar.

«Anda, que yo estaré contigo cuando hables, y te enseñaré lo que debes decir» (Éxodo 4: 12)