Rubíes o sabiduría
Experimenta: ¿De qué le sirvió al ladrón tener en sus manos un rubí? ¿En qué cambiaría tu vida, si tuvieras un rubí?
El rubí es una de las cuatro piedras preciosas más costosas del mundo, además del diamante, el zafiro y la esmeralda. Después del diamante, es la segunda piedra más dura; brillante, sedosa y roja, gracias al hierro y el cromo que contiene. Los rubíes más buscados y costosos son los más rojos, a los que se llama «sangre de paloma». Su brillo es una de las cualidades más apreciadas y se debe a su capacidad de reflejar la luz. Además, es más resistente que el diamante, ya que puede soportar los cambios del medio ambiente, inclusive altas temperaturas, sin sufrir daños.
Los primeros láseres fueron hechos con rubíes. Son tan duros que se usan en el mecanismo de algunos relojes. Un rubí muy pequeño sirve de soporte para que giren continuamente los ejes de los relojes sin desgastarse por la continua fricción.
Alguien se robó un rubí de un palacio en cierta ocasión. Todos los empleados fueron interrogados pero nadie confesó. Una noche, el rey ofreció una cena especial para todos los que trabajaban ahí. Después de la cena, el investigador anunció que acaban de ingerir comida envenenada y el antídoto estaba dentro del rubí robado. Nadie saldría del comedor, a menos que el ladrón confesara. Todos se angustiaron. Después de unos minutos de alboroto y desesperación, el ladrón, por miedo a morir, confesó y entregó el rubí. El investigador luego aclaró que lo del veneno había sido mentira pero llevarían a prisión al ladrón.
Si Dios no te da sabiduría, ni los rubíes te salvan de cometer graves errores. Únicamente la sabiduría que viene de Dios puede ayudarte a tomar las mejores decisiones, así puedes obtener lo que realmente vale en la vida. Por eso pide a Dios sabiduría, porque vale más que los rubíes.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario