El camino del Calvario
«Lo golpeaban en la cabeza con una vara y lo escupían, y arrodillándose delante de él le hacían reverencias. Cuando se cansaron de burlarse de él, le quitaron el manto rojo y le pusieron su propia ropa. Después se lo llevaron para clavarlo en la cruz». Marcos 15: 19, 20, TIA
CUANDO JESÚS SALIÓ DE GETSEMANÍ, sus pies iniciaron el doloroso camino hacia el Calvario. Había aceptado cargar con la culpa de los pecadores, y el castigo que ellos merecían caería sobre él. El juicio, celebrado de noche, fue ilegal y atrozmente injusto, basado en falsas acusaciones. Entre la noche del jueves y la madrugada del viernes, Jesús compareció ante Anás, Caifás, dos veces ante el Sanedrín, Herodes y dos veces ante Pilato.