MARTÍN EMILIO
“En el corazón se refleja la persona” (Proverbios 27:19, NVI).
Cuando solo teníamos a nuestra hija Andreíta, mi esposo y yo buscamos durante un tiempo un apartamento donde vivir. Por fin lo encontramos, y nos sentimos entusiasmados… Hasta que nos topamos con Martín Emilio. Martín Emilio era un perro de raza Beagle; muy bonito, eso sí, pero una molestia continua para sus vecinos. Adivina quiénes eran sus vecinos… ¡Bravo! Nosotros.Los dueños de Martín Emilio eran un matrimonio con dos hijos adolescentes.